Cuando se trata de libros religiosos, difícilmente nos ponemos a pensar en su precio, pues lo que nos importa en ellos es el contenido espiritual, las enseñanzas y hasta la calidad literaria. Sin embargo, una Biblia recientemente exhibida en el monasterio benedictino Saint John’s Abbey podría cambiar nuestro concepto de los libros sagrados.
Desde la invención de la imprenta, la Biblia y los otros libros dejaron de ser copiados a mano, pues el invento permitió la producción en serie y la difusión masiva de los textos escritos. A pesar de ello, un artista de nombre Donald Jackson tenía el sueño de copiar a mano una Biblia, valiéndose de una fina caligrafía, de manera que el monasterio en cuestión lo contrató exclusivamente para realizar dicha labor.
Con más de mil páginas y siete diferentes tomos recubiertos de hojas de oro y plata, la Biblia de Saint John está inspirada en las copias más antiguas del libro. Las letras fueron plasmadas con pluma de ave sobre papel pergamino y durante el proceso se usaron sólo instrumentos fabricados a mano.
Como era de esperarse, la confección de este objeto implicó la toma de muchas decisiones. Una de ellas en torno a la versión que se usaría para asegurar el contenido. Finalmente se eligió la versión estándar aceptada por la mayoría de las iglesias.
El ejemplar de Saint John no está a la venta, pero su costo fue de 130 mil dólares, una suma impensable tratándose de un libro religioso.
Fuente: Worl’s Most Expensive Bible