Swarovski Elements inaugura un nuevo concepto de boutique en Nueva York, en una zona privilegiada de la ciudad. La tienda es la más grande de Estados Unidos en su tipo. Fue Blake Lively, actriz protagonista de la serie Gossip Girl, quien se encargó de cortar el listón y fungir como la madrina de la tienda.
La tienda está ubicada en el 499 de Broadway y cuenta con una superficie de más de 500 metros cuadrados. En ella podemos encontrar las nuevas colecciones de la firma cristalera. Además, ofrece a los clientes un espacio de exposición y una zona de esparcimiento, llamada he Swarovski Crystallyzed Lounge donde, supongo, es posible sentarse a beber una copa.
Lo intersante aquí es que, bajo el lema, «Express yourself», la tienda propone a los visitantes que diseñen sus propias joyas. O más o menos. En el inventario se cuenta ya con un conjunto de diseños vanguardistas, pero cada quien puede personalizar éstos a su gusto, de manera que se obtiene la impresión de haber colaborado en el diseño, aunque las opciones para hacerlo sean limitadas.
El aspecto de la tienda es sorprendente. Nada que ver con la estética recargada que algunos diseñadores deficientes se encargan de imprimir a los cristales de la firma.